Com es habitual, la crònica de Carlos es tant bona que fa reviure la ruta i inclús si cab.... la millora, així que copie i pegue.
Todos tenemos nuestro pequeño territorio local, es aquél que dominamos, sobre el que salimos casi todos los fines de semana, que conocemos bien y que nos hace sentirnos un poco como sus dueños.
Pero Rafa no tiene un territorio, tiene un Reino, con mayúsculas, descubierto no, conquistado día a día, en cada una de sus salidas, en cada una de sus investigaciones sobre ese sendero que parece que sale de ahí o que parece venir de algún sitio.
Un Reino formado por el conjunto de sierras que rodean l’Olleria y que contiene un tesoro en su interior, un conjunto de trialeras de calidad excelsa, todas cinco estrellas, exigentes, de las que te aprietan y te obligan a dar lo mejor de ti mismo en cada momento, esperando tu despiste para cazarte.
A él ya no lo cogen, es su dueño, de los nuestros quedaron pocos sin ser cogidos pero las tiene bien enseñadas, muerden pero sueltan antes de hacer daño, como un perro bien entrenado que solo quiere avisar. Te dan un restregón o un moratón, lo justo para recordarte que ojito con ellas, que te dejan pasar porque ellas quieren, porque Rafa les ha pedido que nos dejen transcurrir por ellas. Es su Reino, el que nos ha permitido un rutonazo épico, de los que no olvidaremos, trialeras que quedarán para siempre en nuestros corazones.
Quedamos a las 8:15 en l’Olleria, para poder salir de Elche a las 7:00 de la mañana, es la miopía del madrugador, exactamente la misma que utilizan las grandes superficies para hacerte creer que lo suyo es más barato, no es lo mismo quedar a las 6:50 que a las 7:00….cuatro incautos cayeron en la trampa….o quizá se dejaron atrapar, no opusieron mucha resistencia.
Una vez en destino, efusivos saludos con Rafa y los Bikers de l’Alcoià, representados por Chemari, Esther y Jose, a los que agradezco un montón su asistencia, y tras soltada de lastre de los primos en la gasolinera, sabiendo que había que soltar peso para comenzar a subir desde el principio, nos ponemos en marcha a las 8:30 con dos premisas claras: la ruta solo era de unos 23 kms pero repleta de sendas y trialeras de montaña, terreno técnico y luchador…..y había que pegarse una pateada de 600 metros.
En su blog, Rafa llama a esta ruta “Ollería Endureta”……en-dureta…..no hace falta hacer muchos jeroglíficos para cogerle sentido, nosotros lo hemos entendido perfectamente esta mañana, aunque quizá podría quitarle el diminutivo….
Lo primero de todo era subir a la Cruz de l’Ollería, con alguna senda inicial muy cerca del pueblo pero, fundamentalmente, por carretera y pista, por la cual nos pasó un e-biker a la velocidad del trueno, fruto del doping energético que cada vez va proliferando más. Por cierto, Rafa nos llamó la atención sobre la entrada de una trialera por la que pasamos por delante, después entendimos el por qué…
Llegamos a la Cruz tras 4.5 kms, donde aprovechamos para disfrutar de las bonitas vistas sobre l’Ollería y realizar unas cuantas fotos, tras lo cual nos ponemos serios porque Rafa anuncia la primera trialera del día, la dels Caçadors, así que protes al canto…
A quien le digas que solo tiene poco más de un kilómetro, tras haberla realizado, no se lo cree, es imposible, si la trialera es larguísima, quizá no en distancia como dicen los aparatejos modernos pero sí en calidad, que le sobra a raudales.
Es una trialera, made in Rafa, técnica, con mucha piedra y escalón, de esas que no permiten coger velocidad sino que te obligan a ir muy concentrado, superando obstáculo tras obstáculo, un escalón, una piedra, un paso delicado tras otro, tampoco puedes pararte demasiado puesto que necesitas un mínimo de velocidad para que la rueda delantera no atasque y te haga salir por las orejas. Es de esas trialeras que me encantan, así que la disfruto a más no poder, tan bonita y con tantos pasos que vamos parándonos unos tras otros echándonos fotos sin parar. Fantástica !!!
Mención especial quería hacer a Diego, que con su Orbea Alma rígida y una Ardent Race delante, se viene trialerar con Rafa y, no solo no muere en el intento, sino que nos da una lección de aúpa….por favor, Diego, no te cumples una doble, ten compasión de nosotros, no podríamos con tanta humillación.
Llegamos abajo con una felicidad portentosa que pronto finaliza con la segunda subida del día, por una pista con algún tramo bastante deteriorado que, tras cinco kilómetros, nos encamina a las Platillao Trails, tres trialerones de narices, muy cercanos que, ante la escasa imaginación de los descubridores, han sido llamados I, II y III….si el que les puso nombre diseñara coches, todavía íbamos en las cajas de zapatos con ruedas que todos dibujábamos de pequeños en el “cole”.
Primero empezamos con el Platillao III, a la que llegamos tras una corta subida por senda calentona. Es otro trialerón cinco estrellas. Dice Rafa que es más fácil que la dels Caçadors pero yo no le ví la facilidad por ningún sitio, es igual de técnica pero mucho más empinada y mucho más suelta…..yijaaaaa !!!
La disfruto muchísimo, también tiene varios tramos comprometidos pero los voy superando bastante bien, qué bárbaro, qué trialeras…..vean las fotos que salieron hoy y se podrán hacer una idea, más de treinta tuve que dejar sin poner para que no se cansaran ustedes al verlas, una locura….
Llegamos abajo, tras otro kilómetro de senda brutal, con un subidón increíble, solo llevamos doce kilómetros y nos hemos cascado dos trialeras de las que quitan el hipo, Rafa eres nuestro Dios, alabado seas !!!
Y qué mejor premio que ir a Bellús a almorzar, ya no por hambre, que había poca por los escasos kilómetros transcurridos, sino por la necesidad de comentar la ruta, los pasos realizados, los revolcones sufridos, pocos se escaparon hoy….
Lo pasamos muy bien en el bar, amenizados por un camarero guasón que no paraba de bromear y arrancarnos sonrisas. La sensación es de ser imposible haber hecho tanto en tan poco terreno….y quedaba mucho más.
Porque tras reanudar y deshacer parte de la llegada a Bellús, nos encaminamos al paredón de 600 metros que supone subir la trialera del Platillao original a pie, subida dura que me sirve para ir haciéndome a la idea de lo que me viene en agosto y que me tomo con tranquilidad. La senda está destrozada, imposible bajarla en bici, posiblemente haya caído pasto de las motos, está reventada.
Reagrupamos en un rellano para volver a subir un corto tramo de pista muy rota hasta la entrada del Platillao III, donde nos esperan Diego y Luís, que tan fuertes estaban que habían subido arriba del todo y desecho parte del camino. Fue increíble encontrar por allí a un local caminando con muleta….¿Cómo narices llegó hasta allí?....nos dice que le han operado de cadera, lo cual no hace más que asombrarnos más, la pista está muy rota, qué cojones…..por cierto, nos advierte sobre la peligrosidad de la trialera que vamos a iniciar, avisados quedamos.
Iniciamos el descenso y la senda resulta ser un mix de las dos anteriores, con la pendiente de la trialera anterior pero no está tan suelta y hay pasos bastante técnicos, como la primera. Paro tras un paso comprometido para fotear, salen instantáneas geniales y soy testigo de una habilidad asombrosa que, me pareció una potra inmensa la primera vez, pero al verla repetida va a ser como una suerte del toreo, si en el albero es conocido el Salto de la Rana del Cordobés, en el MTB se conocerá el salto de la horquilla de Chemari.
Aún recuerdo vídeo del susodicho bajando Guixop y, en el tramo malo, encallar horquilla pero, yendo rápido y muy atrás, consiguió que soltara y salir catapultado hacia delante, algo así como en un trampolín pero sobre la bici….se escuchaba hasta el “tongggggg” de la suspensión delantera.
Tras pensar que aquel día se le había aparecido todo el santoral junto, hoy paro tras un doble escalón en el que toqué el culo con mi neumático trasero, por lo que os haréis una idea de lo interesante que era. Tras intentarlo algunos, llega Chemari, mete horquilla en hoyo pero con tanta fuerza y peso retrasado que se libera y sale catapultado adelante como una bala, qué bárbaro, aplaudí como un loco y saque cartulinas de diez puntos, bien merecidos se los tenía.
También le tiró Esther, la reina del enduro alcoyano, de moral inquebrantable y más valiente que todos nosotros juntos, que maravilla verla afrontarlo todo con esa decisión. No tanta tenían sus fuerzas, que estas sí estaban bajo mínimo.
Retomo la bajada y paso un tramo espectacular, repleto de gente haciéndome fotos y haciéndome sentir como un famoso en Beverly Hills. Menos mal que llevaba puestas las gafas de sol, de otro modo me hubiera despeñado con los flashes.
Lo bajo prácticamente todo salvo un par de curvas bastante complicadas, le tiro a la primera pero, al no conocer la salida, prefiero echar pie a tierra antes de meterme en un lio. Detrás viene Jose que se la pasa como si nada, qué bueno es….la siguiente curva también la pasa Julio, lástima no haber testigos de ello…..lo único que atestiguan mis fotos es que, en los pasos delicados, coge aire e hincha los mofletes así como diciendo…..que me mato, que me mato….
Reagrupamos abajo y, pese a ser bastante tarde, nos convence Rafa para hacer un bonus track, una guinda a tan hermoso pastel que solo suponía un rodeo muy pequeño que, además, en honor a los ilicitanos y para calmar las ansias de Luís, transcurría parte por un barranco sin senda, salvaje en su totalidad….yijaaaa !!!
Fue un tramo corto pero muy disfrutado por los oriundos de la ciudad de las palmeras, en el que Diego volvió a darnos toda una lección de cómo montar con una rígida. A Esther se le va encendiendo el pilotito rojo, hace muchísima calor y nos vamos quedando sin agua.
Menos mal que encontramos una fuente en la que reponer líquido y coger aire para continuar después hacia ese bonus track que no fue sino la entrada sobre la que nos llamó la atención Rafa al inicio del día.
Dicha trialera tenía una losa de piedra de pendiente absurda, con trazada oblicua hacia la izquierda pero caída de la piedra hacia la derecha, por lo que si tirabas mucho de freno trasero, la rueda bloqueaba y cruzaba la bici justo hacia el lado contrario hacía el que había que ir….
Esther volvió a demostrarnos su gran amor por la naturaleza aunque con menos vehemencia que en San Cayetano, Crevillent, esta vez no abrazó ningún arbusto sino que le lanzó un besito a dos centímetros escasos de sus ramas quizá atraída por el fotógrafo que le esperaba a sus pies, espero le demostrara el mismo entusiasmo por la noche que el demostrado en la cima de la Silla del Cid…
Tras ese fantástico paso, seguimos bajando por trialeras divertidas por la zona de la Gaveta, con varios toboganes entre pinos muy cercanos pero contados por Rafa, que nos advirtió de no llevarnos ninguno a casa.
Salida a carretera y de vuelta a l’Ollería, por más sendas que terminaron prácticamente en los coches para completar un día fantástico. Al final la tontería quedó en 31 kms de fantástica ruta con unos 1.150 metros de desnivel, nada mal para el calor que hizo.
Gracias, Rafa, por invitarnos a tu Reino….el mes que viene visitaremos otra ciudad amurallada pero ya les contaremos cuando toque.
Moltes gràcies a voaltres per vindre i fer-me passar un matí tant bo. Ací les fotos que tinc jo https://www.facebook.com/rafel.vidaltipotane/media_set?set=a.10155091214571138.1073741897.560231137&type=3&pnref=story
Hola! ¿Podéis pasar el track de la salida?
ResponEliminaUn saludo y gracias de antemano!